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La pequeña capilla privada para los sacerdotes del Colegio la Mennais es sólo una muestra del proyecto inicial, en el cual se prevía mucha más obra en cerámica armada. La propuesta arquitectónica de Justino Serralta y Carlos Clémot, con Dieste y Montañez encargados de la estructura, se inició en 1958 y luego de varios cambios importantes al proyecto, sólo permanecieron paredes de cerámica armada y las bóvedas del Oratorio en un edificio en el cual predominan los pórticos de concreto armado.

La solución estructural a este íntimo espacio es el encuentro entre dos bóvedas troncocónicas rebajadas con distintas alturas, de modo que entre ellas se define un luneto que geneal la iluminación sobre el altar. El espacio entre bóveda y pared armada en la parte posterior  genera una ranura de luz que baña dicha pared, haciendo destacar la textura y los tonos del ladrillo.

 

Sobre este edificio puede consultarse:

Ado, Estefanía y Natalia Jorcín. Tesina: Colegio La Mennais. Facultad de Arquitectura. Universidad de la República, 2012.

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