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Es el primer gimnasio de los construidos por Dieste. La obra resulta sencilla ante sus logros posteriores, pero esta fue una de las primeras experiencias del ingeniero para lograr sus grandes cubiertas de cerámica armada. Se trata de bóvedas continuas de doble curvatura, con 26 metros de luz libre entre apoyos en una edificación que alcanza los 1.500 metros cuadrados de construcción.

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